Hacer frente a una mudanza nunca ha sido fácil, ya que ésta supone un gran cambio en nuestras vidas y, por norma general, siempre viene acompañada del estrés, algo que a todos nos resulta un tanto agobiante, pero que no cunda el pánico; coge aire antes de comenzar, que con un poco de paciencia, algunos trucos y recomendaciones, y contando con la ayuda de una empresa de transportes que nos facilite el “trabajo duro”, todo resulta mucho más fácil y llevadero.
Por eso hoy, desde Mudanzas Seven, como expertos en el sector, queremos dejaros unos cuantos trucos y consejos a seguir a la hora de realizar una mudanza.
Primero, antes que nada, sería recomendable que des portazo al estrés, y a continuación cogieras papel y lápiz y comenzaras a organizar, de acuerdo con la empresa de transportes, el día que tendrá lugar el traslado de todas tus pertenencias a la nueva casa; de esta manera, sabrás del tiempo del que dispones para empaquetar todas tus cosas y comenzar a organizarlas y guardarlas en cajas.
1. SI NO LO USAS, ¡NO TE HACE FALTA!
Seguro que de primeras al leer esto se te viene a la cabeza algún aparato, utensilio, mobiliario, prenda.. que tienes guardada y no has usado en años; y si es así, entonces, ¿para qué lo quieres? Esa es la segunda pregunta que deberás hacerte antes de comenzar a organizar las cajas para tu mudanza. Sí, hemos dicho la segunda; no tengas prisa que en seguida descubrirás cuál es la primera de ellas.
Antes de comenzar a empaquetar todas tus pertenencias, hay una serie de preguntas que debes hacerte; la segunda, ya la conoces, pero la primera de todas ellas cada vez que vayas a empaquetar algo para trasladarlo a la nueva casa es: ¿lo he usado en el último año?
Si la respuesta es no, aquí llega la segunda pregunta que ya conoces, ¿para qué lo quieres? Y como ya sabéis, no hay dos sin tres, y la tercera pregunta para tomar la decisión final de si este objeto se viene con nosotros o lo “dejamos por el camino” sería: ¿lo voy a usar?
Si la respuesta final es un no, entonces ¡deshazte de ese objeto! De esta manera, ahorrarás en espacio, dejando sitio en las cajas a las cosas realmente necesarias e imprescindibles para ti; pero además, te ahorrarás algo de tiempo al no tener que empaquetar y recolocar en tu nueva vivienda estos objetos que no vas a usar.
2. NO VACÍES TU ARMARIO.
Estarás pensando que nos hemos vuelto locos, pero no es así; ya que este truco, aunque a priori parezca una tontería, te ahorrará tiempo y dinero.
Dejando los objetos ligeros, como por ejemplo, la ropa, en el interior de los muebles te proporcionará una doble ventaja, ya que, de esta manera, necesitarás menos cajas y te ahorrarás el tiempo de tener que empaquetarlas; y una vez ya en la nueva casa, tu armario ya estará organizado sin tener que echar un buen rato sacando todos tus “modelitos” y organizarlos de nuevo.
Ahora bien, no creas que este truco es válido para todo, ya que es apto para aquellos objetos ligeros; aquellos pesados como por ejemplo, libros, adornos o la cubertería, sería recomendable empaquetarlos bien en cajas, para que vayan mejor protegidos y nuestros muebles no sufran ningún tipo de daño al moverlos con tanto peso; lo que nos lleva a nuestro siguiente consejo.
3. OLVÍDATE DEL DICHO “BURRO GRANDE ANDE O NO ANDE”.
Efectivamente, ahora comprenderás a qué nos referimos; y es que este dicho para la organización de una mudanza es preferible no seguirle al pie de la letra, sobre todo a la hora de elegir las cajas que vamos a usar para guardar nuestras pertenencias.
Aunque inviertas algo más de tiempo, usa cajas pequeñas. Éstas se manejan con mayor facilidad y a la hora de tener que desempaquetarlas en tu nueva casa e instalar tus cosas de nuevo, lo harás de manera más cómoda y rápida.
4. DALE UN “NOMBRE” A CADA CAJA.
Y claro estaba, que lo siguiente después de empaquetar y precintar cada caja que vamos llenando, es ponerle un nombre, especificando lo que contiene en su interior para que así sepas lo que hay en cada caja, y que a la hora de desempaquetarlas lo hagas mucho más rápido.
5. UTILIZA BOLSAS DE BASURA.
Muy elegante que se diga, no es que sea, pero se trata de uno de los mejores trucos por varios motivos.
Aquellos artículos blandos como mantas, edredones, peluches, etc, no necesitan cubrirse de materiales duros para no sufrir daños; por ello, meterlos en bolsas de basura resistentes nos facilitará su embalaje y nos pueden servir de protección para el resto del mobiliario en el interior del camión y para rellenar aquellos huecos libres y hacer de “tapón” para que las cajas no se muevan en el traslado.
Y qué decir tiene que estas bolsas de basura, aunque sean menos glamurosas, también necesitarán que las des un nombre.
Pues hasta aquí los consejos previos para organizar y comenzar a dar forma a una mudanza. Esperamos que os hayan servido de ayuda si os encontráis en plena mudanza o tenéis prevista una próximamente; o si no es el caso, que os sirva de consejo para futuras situaciones o como datos curiosos que descubrir y aprender.
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